A mediados del mes de marzo de 2022, el medio The New York Times realizó una publicación referente a la propuesta que ha formulado la UEFA respecto a la modificación del llamado Fair Play Financiero, para nadie es un secreto que desde que Aleksander Ceferin asumiera la máxima dirigencia de la UEFA ésta organización haya experimentado un claro lavado de cara, pues debido a los años de gestión de Michel Platini, ésta se vio inmersa en un ostracismo que conllevo a la decadencia de su credibilidad. Ahora bien, la propuesta respecto al nuevo Fair Play Financiero que quiere aprobar la UEFA puede interpretarse como un nuevo y más riguroso control financiero para los clubes que puede traer tanto beneficios como perjuicios, pues la propuesta consiste en la imposición de la prohibición de gastar más del 70% de los ingresos anuales.
Desde los primeros compases de la década del 2010 cuando comenzó a tomar relevancia el mecanismo del Fair Play Financiero, este no ha resultado del todo efectivo ni ha generado seguridad jurídica en lo que respecta a los clubes ni la certeza del carácter punitivo de las sanciones impuestas, pues casos destacados como fuere el del Manchester City en el 2020 fueron revocados, en esa oportunidad se le acusó de incumplir el Fair Play Financiero al haber cometido “infracciones graves” al haber “exagerado” los ingresos de patrocinio en sus cuentas entre los años 2012 y 2016 según expuso en su oportunidad la Cámara de Adjudicación del Comité de Control Financiero de Clubes, lo cual conllevó a la imposición de dos sanciones, la primera, referida a la prohibición de participar en competiciones europeas durante las campañas 2020-2021 y 2021-2022, y la segunda, referida al pago de una multa de 30 millones de euros. No obstante, el club inglés recurrió ante el TAS, y logró el levantamiento de la sanción impuesta.
Vale destacar que la figura del Fair Play Financiero surgió con la finalidad de evitar que los dueños de los clubes invirtieran ilimitadamente con su dinero particular en los clubes, lo cual sin duda representa una desigualdad sin comparación alguna, considerando la fortuna que tienen los dueños de los distintos clubes europeos (por ejemplo, el Newcastle United es actualmente el club más poderoso económicamente del mundo gracias al Fondo Saudí de Inversiones, por encima inclusive del PSG y el propio Manchester City).
Podría considerarse que desde la implementación del Fair Play Financiero han sido más las infracciones perdonadas que las cumplidas de manera efectiva, pues o bien el TAS ha fallado a favor de los clubes levantando las sanciones impuestas, o el mismo órgano impositor ha omitido imponer la totalidad de la sanción o la ha impuesto de manera parcial, causando incertidumbre y dudas respecto a la efectividad y viabilidad de dicha figura.
Con ésta propuesta del Fair Play Financiero, la UEFA busca precisamente revertir ésta situación, que evidentemente no sería impuesta de manera inmediata, sino que, al igual que las Nuevas Reglas de las Cesiones que entrarán en vigor a partir del mercado estival del 2022, se aplicarán de manera progresiva con una fecha límite para la entrada en vigencia de la totalidad de los cambios. Prevé la UEFA un período de tres temporadas de transición del actual sistema al propuesto, las cuales una vez culminadas, el importe de la prohibición de gastos sea del 90% y no del 70% de los ingresos obtenidos en el año.
Los encargados de elaborar la propuesta han avizorado que en la actualidad hay alrededor de 40 clubes que no pueden asumir al día de hoy la normativa propuesta debido a sus ingresos o bien porque precisamente tienen problemas con el Fair Play Financiero. Aunado a lo anterior, la propuesta permite un desnivel de aproximadamente 10 millones de euros a los clubes siempre y cuando estos no hayan tenido problemas financieros en el pasado y las cuentas estén saneadas, lo cual se complementa con el período de los 3 años de transición.
Asimismo, en aras de otorgarle a las sanciones un carácter más punitivo que genere presión en los clubes a cumplir con el Fair Play Financieron, la UEFA ha optado por incorporar a la propuesta del descenso de categoría en las competiciones, pues si el club sancionado compite en la Champions League, debido a su incumplimiento será descendido a la Europa League, y lo mismo sucedería con el club sancionado que compite en la Europa League, este sufriría el descenso a la Conference League, sin que ello excluya la posibilidad de excluir totalmente al club sancionado de las competiciones europeas, por lo que podría considerarse el descenso de categoría como una sanción a un ilícito financiero de menor gravedad.
Por otra parte, habría que evaluar la viabilidad del descenso de categoría en el nuevo formato de la Champions League previsto para el año 2024 donde los clubes competirán en una tabla común, ello no ha escapado del ojo de los redactores de la propuesta quienes han previsto la sanción de rebajar los puntos obtenidos a aquellos clubes que incumplan con las normas financieras, igualmente debe precisarse que en el formato previsto para el 2024, ésta sanción de reducción de puntos tendría mayor lógica y aplicabilidad si se compara con el formato actual de las fases de grupos en las cuales, la reducción de puntos conllevaría a la eliminación del club de la competencia, siendo en este caso de la fase de grupos, el descenso de categoría la sanción ideal.
El nuevo Fair Play Financiero del cual el mismo Aleksander Ceferin es promotor, se enmarca en la tendencia reformista de índole financiero que ha pretendido implantar, pero que no ha resultado del todo satisfactoria, pues la legislación tanto del Bloque Europeo como de aquellos países no miembros de la Unión Europea ha constituido un freno a ello, así como también la negativa de los clubes económicamente poderosos, pues con anterioridad, se propuso imponer un límite salarial estricto con tope y tasa de lujo que debían pagar los clubes que incumpliesen el Fair Play Financiero, por lo que debían enterar a la UEFA el límite excedido y ésta lo repartiría a los demás clubes con tal de equilibrar las competiciones, esto se vio frenado principalmente por la legislación laboral europea y la rotunda negativa de los clubes poderosos económicamente.
Ahora bien, uno aspecto importante a evaluar es el que está referido a ¿qué clubes son los más favorecidos con el nuevo Fair Play Financiero? Explica el New York Times que sin duda alguna los clubes ingleses son los más beneficiados por la aprobación de la propuesta, ya que, a nivel mundial son los equipos que más ingresan por concepto de derechos televisivos y de imagen, pues la The Football Association tiene acuerdos millonarios con cadenas televisivas como Sky Sports (principal patrocinador de la segunda división inglesa que actualmente recibe el nombre de SkyBet Championship) o la BBC, inclusive por derechos de imagen y exclusividad con EA Sports para el videojuego FIFA, a comparación de otras ligas que no tienen fuertes ingresos por concepto de derechos televisivos ni por derechos de imagen o exclusividad de patrocinios, todo esto se traduce con la nueva propuesta a lo siguiente: mayores ingresos, mayores inversiones, mejores plantillas.
En la primera propuesta que fuere presentada por el Presidente de la UEFA hace unos meses y que fuere rechazada por los clubes, estos pedían que el porcentaje a gastar de los ingresos fuere del 85%, y los clubes alemanes se negaron a dicho porcentaje, pues debe destacarse que la Bundesliga no es precisamente una liga con fuertes ingresos por concepto de derechos televisivos ni patrocinios exclusivos, aunque sus clubes son de los más solventes económicamente a nivel mundial, asimismo, con el 70% que se pretende imponer se busca evitar que los futbolistas reciban salarios desproporcionales que permitan el aumento de sus fortunas personales y no el buen desempeño futbolístico que estos pudieran tener ni la salubridad económica del club, igualmente, en lo que respecta a los derechos televisivos y de patrocinio, la propuesta de la UEFA busca evitar la suscripción de contratos desvirtuados por la relación entre el grupo empresarial y la empresa anunciante.
Otro aspecto a destacar es que, debido a las dudas causadas por el Fair Play Financiero, la UEFA busca otorgarle otro nombre que difiera con el actual con tal de causar una mayor aceptación respecto a la figura, pero, la aceptación a la figura del Fair Play Financiero no radica en un nombre, sino en la efectividad que ésta pueda tener en el mundo real, por los momentos han evaluado otorgarle el nombre de “Normas de Sostenibilidad Financiera”.
Precisado lo anterior, habrá que esperar cuando la UEFA se reúna y decida si aprueba o no ésta nueva normativa referente al Fair Play Financiero que por los momentos es una simple propuesta filtrada, pero que, de entrar en vigencia, sin duda alguna marcaría un antes y un después en el aspecto financiero del fútbol europeo que podría conllevar a una mayor competitividad entre los clubes de las distintas ligas y el saneamiento de las finanzas de muchos clubes que actualmente tienen disparidades en lo que a ellas respecta y han llegado a abusar de los ingresos obtenidos vulnerando la normativa actual sin recibir sanción efectiva alguna.
César Manuel Candiales García
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